La concejala Sandra Caballero critica el retraso de su aprobación

El PSOE dice que el presupuesto municipal de Badajoz no es "sólido ni consensuado ni participativo"

La concejala socialista Sandra Caballero.

La concejala socialista Sandra Caballero. / A. M. R.

Ascensión Martínez Romasanta

Ascensión Martínez Romasanta

Ni sólidos ni consensuados ni participativos. Es el análisis que realiza el grupo municipal socialista de los presupuestos municipales de 2024 que ha presentado el equipo de gobierno y que mañana jueves llevará a un pleno extraordinario para su aprobación.

La concejala del PSOE Sandra Caballero criticó ayer el retraso, pues llegan en julio y no entrarán en vigor hasta agosto, por lo que solo tendrán cinco meses de recorrido. Negó que hayan sido consensuados, ni con colectivos y asociaciones de la ciudad ni con los grupos políticos del ayuntamiento y tampoco incluyen presupuestos participativos, como establece el Reglamento de Participación Ciudadana. 

La concejala señaló que los presupuestos no son «sólidos», pues «después de tanto tiempo para confeccionarlos, se esperaba una propuesta bien elaborada, pero es un texto muy básico» y criticó por la «escasa incidencia» que tendrán para la ciudad.

El PSOE considera, además, que estas cuentas «no traerán un nuevo modelo de ciudad, el lema del equipo de gobierno local», ya que cualquier estrategia del ayuntamiento liderado por el PP «está vacía totalmente de contenido».

Caballero lamentó también «los escasos créditos para inversiones en proporción al global del presupuesto, unos 11 millones de euros del total de 139 millones, por lo que no llegan ni al diez por ciento». Además «para realizar inversiones se venderá patrimonio», y si no se realizan estas operaciones «¿no habrá entonces proyectos?», se preguntó. En concreto, la concejala se refirió a la inversión prevista para el paseo de la Radio. «Ya era hora», comentó, pues su grupo denunció en 2014 su mal estado. Consideró insuficiente la inversión destinada a la red de abastecimiento (800.000 euros) y, a propósito, anunció que los socialistas van a solicitar «una mesa del agua» para intentar mejorar la calidad del servicio. Por último, llamó la atención sobre el abultado capítulo de gastos corrientes, debido a las privatizaciones.