El sector taurino extremeño sobre la supresión del premio de tauromaquia: "Es una cacicada y censura ideológica"

Indignación en el sector taurino extremeño por la decisión del Ministerio de Cultura, liderado por Ernest Urtasun, de suprimir el Premio Nacional de Tauromaquia. "Es una cacicada que indigna, pero no sorprende viniendo de un ministro que, más allá de antitaurino, que es muy respetable, ya se ha expresado con anterioridad sumamente intolerante", lamenta el torero extremeño Miguel Ángel Perera. A su juicio, lo que hace Urtasun es "gobernar desde la ideología, obviando las apetencias y los gustos culturales de una parte muy grande de la sociedad".

Para el presidente de la Fundación Toro de Lidia, Victorino Martín, la decisión del ministro de la coalición Sumar "es una censura por discriminación ideológica". "Por ley, los gobernantes públicos tienen la obligación de difundir, proteger y fomentar la tauromaquia en todos los sentidos", sostiene el a su vez responsable de la histórica ganadería afincada en Extremadura. "La tauromaquia goza de muy buena salud, se están reabriendo plazas de toros que habían cerrado políticos por su ideología, además de que los jóvenes están acudiendo de forma masiva", defiende.

El propietario de la plaza de toros de Olivenza, Jesús Ortiz, también se posiciona en contra de que se elimine este galardón taurino. "No estoy en absoluto de acuerdo, me parece un sinsentido, pero era previsible porque desde que han entrado en el Gobierno estos socios (en alusión a Sumar), quieren acabar con las tradiciones y especialmente llevan a cabo un ataque frontal a la tauromaquia", sostiene el empresario. Pese a este varapalo para el sector, se muestra optimista: "La tradición de la tauromaquia es muy fuerte y va a costar derribarla".

"La decisión me parece totalmente errónea, arbitraria y en busca de un protagonismo político que no tiene mucho sentido cuando el propio Gobierno lleva dando el premio desde hace años", afirma Joaquín Santiago Bueso, propietario del hierro de Valdealcalde, en Alcántara. A su juicio, los propios políticos "no ponen en valor lo que aporta realmente el mundo del toro, ya no solo desde el punto de vista medioambiental, ganadero o económico, sino también lo que aporta a la sociedad".