Opinión | ANÁLISIS

El día después de la bajada de tipos

El BCE evita comprometerse con una senda de reducción de tipos tras la bajada de hoy

El BCE evita comprometerse con una senda de reducción de tipos tras la bajada de hoy

La decisión de recortar el precio del dinero es histórica, porque por primera vez el Banco Central Europeo (BCE) se adelanta a una decisión de la Reserva Federal estadounidense (Fed), y porque además cierra un ciclo. Nada menos que un ciclo de 8 años, que es el tiempo que ha tardado el BCE en acometer un recorte de los tipos tras las fulgurantes subidas que llevaron el precio del dinero, desde julio de 2022, del 0% al 4,5%. El objetivo: combatir una inflación que en España superó el 10% por los daños colaterales de guerras y conflictos varios. En este sentido, el objetivo está conseguido o casi. Los precios ahora superan apenas el 2% y parecen embridados. Pero por si acaso, la jefa del BCE, Christine Lagarde, evitó comprometerse con nuevos plazos de recortes.

La cuestión es qué pasará ahora. Si damos por bueno que la inflación está controlada (dejando a un lado riesgos geopolíticos como Ucrania u Oriente Medio), la realidad es que una bajada de tipos, que es previsible además que continúe con mayor o menor intensidad en los próximos meses, debería provocar una reactivación económica por el abaratamiento de créditos e hipotecas para los ciudadanos, lo que incidiría en un aumento del consumo. Pero lo que probablemente tendrá más impacto es que se abaratará el coste de financiación para las empresas, sobre todo para las que buscan una financiación a medio y largo plazo. Para tener un dato, el tipo de los préstamos a empresas estaba por encima del 5%.

Y esto es un dato muy relevante, porque si la financiación para las empresas se abarata, invertirán más y se generará más empleo, algo fundamental ya que a pesar de los buenos datos económicos, el paro es nuestro talón de Aquiles. Y como no hay anverso sin reverso, tengamos en cuenta que a lo que no terminará de beneficiar la bajada, especialmente por el distinto ritmo que lleva la Fed en esta desescalada, es a la paridad euro-dólar, que es un factor muy importante para favorecer las ventas internacionales de las compañías.

Respecto al otro gran bloque, el de las ventas de viviendas, claramente se verá beneficiado el sector, ya que también se abarantan las hipotecas, aunque dado el nivel de precios es complicado pensar que crecerá con vigor la venta de viviendas.