Operación polémica

El BBVA felicita al Gobierno por el crecimiento económico pese a su oposición a la opa sobre el Sabadell

Torres da la "enhorabuena" a Sánchez por el "extraordinario comportamiento" de la economía Española

El presidente del BBVA, Carlos Torres, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El presidente del BBVA, Carlos Torres, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. / BBVA

Pablo Allendesalazar

Pablo Allendesalazar

Gesto del BBVA al Gobierno, pese a la frontal oposición reiterada por el Ejecutivo a la opa hostil del banco sobre el Sabadell. El presidente de la entidad, Carlos Torres Vila, ha felicitado este jueves personal y públicamente a Pedro Sánchez por el crecimiento económico de España. "No puedo menos que dar la enhorabuena al Gobierno por este extraordinario comportamiento que nos diferencia todavía más frente al resto de Europa", ha alabado el banquero durante una cumbre empresarial entre España y Turquía celebrada en la sede del BBVA en Madrid con presencia del presidente del Gobierno y de su homólogo turco, Recep Tayyip Erdoğan.

Torres no ha escatimado elogios. España, ha asegurado, "ha demostrado tener una economía resiliente y dinámica, que ha crecido y seguirá creciendo muy por encima de la media europea, impulsada por el buen comportamiento del empleo, el consumo, el turismo, las exportaciones, y también por el efecto beneficioso de los fondos europeos, cuyo efecto empieza a ser muy notable". Es decir, que no ha aprovechado para lamentar el retraso en la llegada de dichos fondos, sino todo lo contrario y en contra de lo que suelen hacer los empresarios. El servicio de estudios del banco, ha continuado, preveía a principios de año que el país creciese un 2,1% en 2024, frente al 0,7% de la zona euro, pero ahora calcula que la expansión será del 2,5%, una "cifra muy notable en el contexto actual" por la que no ha dudado en dar la "enhorabuena" al Gobierno. 

Pero no solo por ello: "También por su apuesta decidida por la transición ecológica y las energías renovables, poniendo a España en una posición de liderazgo, y por el impulso del crecimiento inclusivo, objetivos ambos que desde BBVA compartimos plenamente. La reciente puesta en marcha del Consejo de la Productividad ayudará además a sentar las bases de un crecimiento sólido a largo plazo, apoyado en la inversión, que conduzca a mejoras del poder adquisitivo de todos los españoles".  

Dimensión particular

Al contrario que otros banqueros, Torres no ha sido nunca un particularmente combativo en asuntos políticos, si bien no ha dudado en expresar posiciones críticas en algunos momentos. Durante la presentación de los resultados anuales del banco en enero, por ejemplo, advirtió de que era necesario generar "confianza" para que los agentes económicos se decidan a invertir en España porque "tienen claras las reglas de juego, el marco institucional, y el funcionamiento del Estado de derecho". También se ha posicionado públicamente en contra del impuesto a la banca del Gobierno, como todos sus homólogos. Es habitual, en cualquier caso, que los empresarios se muestren más prudentes cuando están en presencia de los miembros del Ejecutivo en actos públicos como el de este jueves. Pero las alabanzas de Torres tienen una dimensión especial al producirse en plena opa al Sabadell.

El también presente ministro de Economía, Carlos Cuerpo, viene advirtiendo desde el primer momento de su "rechazo" a la operación. Es particularmente relevante porque el Gobierno tiene al menos dos armas legales para entorpecer la integración. Por un lado, si la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) lleva la operación a la conocida como segunda fase (aquella en que se analiza con más detalle una concentración que "puede obstaculizar el mantenimiento de la competencia efectiva en todo o parte del mercado nacional"), el Consejo de Ministros tendría la potestad de endurecer las condiciones a la integración que hubiera fijado el organismo. Además, si la opa tiene éxito, el ministro de Economía puede vetar la fusión de los dos bancos, obligando al BBVA a mantener el Sabadell como una filial participada. 

Pese a ello, el BBVA tiene la intención de no desistir e ir hasta el final con la compra. Así, confía en que la CNMV apruebe la operación con condiciones en primera fase, como hizo con la unión CaixaBank-Bankia, lo que impediría al Gobierno pronunciarse en esa fase. Pero incluso si va a segunda fase, tiene dudas legales de que el Ejecutivo pudiera endurecer las condiciones, ya que habitualmente esa potestad se ha utilizado para suavizarlas. Además, cree que el actual Gobierno u otro Ejecutivo posterior terminaría por permitirle fusionarse con el Sabadell una vez comprado. Pero no ser así, estima que la operación seguiría teniendo sentido económico y que las sinergias (ahorros de costes) se verían reducidas en una cantidad pequeña y asumible.