San Juan 2024

Gigantes y Cabezudos en Badajoz: una tradición que recuerdan los mayores y disfrutan los niños

Decenas de familias se dan cita en el paseo de San Francisco en la mañana de este día festivo

Ascensión Martínez Romasanta

Ascensión Martínez Romasanta

Gigantes y Cabezudos, esa tradición que nunca ha faltado en los pueblos en la celebración las fiestas locales y a la que Badajoz no ha renunciado, se ha convertido esta mañana, día festivo en la capital pacense por ser la onomástica de su patrón, San Juan, en una cita para los mayores y para los niños, que se han acercado a hacerse fotos y a saludarlos.

Un extremeño y una extremeña de varios metros de altura presiden la comitiva, que integran otra docena de jóvenes disfrazados con enormes cabezas de lobo, arlequín, princesa, demonio o torero y dos caballos. Forman parte de un grupo de amigos la barriada de Llera. Los avisó el padre de uno de ellos que es responsable de la organización. Esta mañana de intenso calor se disfrazarán por primera vez de unos personajes con los que están recorriendo las calles del centro, desde el paseo de San Francisco hasta la plaza Alta, repartiendo caramelos que llevan en sus mochilas. Los Gigantes y Cabezudos van acompañados de la Charanga Disonancia.

Dos cabezudos: el torero y la princesa.

Dos cabezudos: el torero y la princesa. / JOTA GRANADO

Emilia tiene 91 años y no ha querido perdérselos, en su silla de ruedas. Los ve todos los años. "Siempre me gusta venir, me gustan mucho". Desde que era pequeña. "De chica me iba detrás de ellos", recuerda. "Hoy no puedo", pero sí ha querido verlos. Cuenta que cuando era pequeña eran soldados los que se disfrazaban y salían de la plaza de San Andrés. A Emilia nunca le han dado miedo. "Yo iba siempre sola a ver los cabezudos" y cree que los personajes no han cambiado mucho en todos estos años. Es una tradición anclada en el tiempo.

La charanga.

La charanga. / JOTA GRANADO

En San Andrés los recuerda Manuel Durán, que hoy ha llevado a sus nietos, Ainhoa y Manuel. Los han visto más veces "porque mi yerno se ha dedicado todos los años a vestirse y volvemos por tradición". Desde hace dos años no se disfraza. Aun así participan "porque así los niños están entretenidos". A Manuel nieto el que más le gusta es el gigante extremeño y querría vestirse alguna vez.

También Gloria ha acudido con sus nietos: Carlos, Gloria y Marta. Sus padres están trabajando y hoy pasan el día con los abuelos. "Nos toca venir a traerlos, porque ellos no saben lo que son los Gigantes y Cabezudos". Es más, antes de acercarse a San Francisco la abuela les ha puesto un vídeo para que supieran qué iban a ver. "Les daba un poco de miedo, pero cuando han visto que realmente son como de cartón, se han tranquilizado". De momento, no se estaban moviendo. "Pensarán que son como estatuas". Ya se verá cuando empiecen a bailar. Gloria echa de menos que hubiese más personajes. Los dos vestidos de extremeños le parecen "originales" y "están bien, para los críos son una novedad".

Los caballos de la comitiva.

Los caballos de la comitiva. / JOTA GRANADO